Te vi hace varios días, 4 para honrar a la precisión, cuando salía del café con Ana, Edgar y Sandra. Te vi más bien cuando íbamos en el coche con Anita...para el caso es lo mismo, no te habría hablado si vinieras en el mismo carro, no te hablaría si estuvieras ahora mismo junto a mi. No es que no te quiera. Todo lo contrario, te amo, te amo desde siempre, te amo para siempre.
El caso es que eres demasiado triste como para estar contigo. No soporto tu tristeza, ni la mediocridad con la que haces algunas cosas, no me malentiendas, te amo a pesar de eso, a pesar de todo. Pero no encuentro la manera de decírtelo, es eso más bien. No sé como mirarte a los ojos y decirte "no, no ahora y no más", es por eso que decidí evitarte y corresponderte sin ganas cuando por alguna razón te encuentro e inevitablemente me besas.
Y si alguien me lo preguntara, no, no te lo voy a decir. Porque no te lo mereces, porque jamás sabré como decirtelo y porque no se me da la gana. Eres el más viejo de mis amores, el menos afortunado, al que siempre voy a querer.
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